Hay tres maneras de gestionar la propiedad del copyrighy en el software libre contribuído por mucha gente. La primera es ignorar totalmente el asunto del copyright (no recomiendo esta). La segunda es recoger un acuerdo del contribuyente a la licencia(CLA, de las iniciales de contributor license agreement) de cada persona que trabaja en el proyecto, garantizando explícitamente al proyecto el derecho de usar el código de esa persona. Generalmente esto es suficiente para la mayoría de proyectos, y algo positivo está en que en algunas jurisdicciones, los CLAs pueden ser enviados por correo electrónico. El tercer modo es obtener asignaciones de propiedad del copyright de parte de los contribuyentes, de modo que el proyecto (por ejemplo, alguna entidad legal, generalmente sin ánimo de lucro) es la propietaria de todo el copyright. Esta es la manera más hermética legalmente, pero es también la más onerosa para los contribuyentes, sólo algunos proyectos insisten en ella.
Nótese que incluso bajo la propiedad centralizada del copyright, el código permanece libre, porque las licencias de software libre no dan al propietario del copyrifht el derecho a apropiarse retroactivamente de todas las copias del código. Por lo tanto, incluso si el proyecto, como entidad jurídica, de repente decide cambiar y empezar a distribuir el código bajo una licencia restrictiva, eso no causaría un problema a la comunidad. Los otros desarrolladores podrían simplemente comenzar un fork basado en la última copia libre del código, y continuar como si nada hubiera pasado. Debido a que saben que pueden hacer eso, muchos contribuyentes cooperan cuando se les pide firmar un CLA o asignar el copyright.
Algunos proyectos nunca recogen CLAs o asignaciones de copyright de sus contribuyentes. En lugar de eso, aceptan el código siempre que quede razonablemente claro que el contribuyente pretendía que fuera incluído en el proyecto.
Bajo circunstancias normales, eso es suficiente. Pero de vez en cuando alguien puede decidir demandar por infringimiento del copyright, alegando que ellos son los verdaderos propietarios del código en cuestión y que nunca accedieron a que fuera distribuído por el proyecto bajo una licencia libre. Por ejemplo, el Grupo SCO hizo algo como esto con el proyecto Linux, veáse http://en.wikipedia.org/wiki/SCO-Linux_controversies para más detalles. Cuando esto ocurre, el proyecto no tiene documentación que demuestre que el contribuyente formalmente ha garantizado el derecho a utilizar el código, que puede hacer la defensa legal más complicada.
Los CLAs probablemente ofrecen el mejor compromiso entre seguridad y conveniencia.Un CLA es habitualmente un formulario electrónico que un desarrollador rellena y envía al proyecto. En muchas jurisdicciones, el envío por correo electrónico es suficiente. Una firma digital segura puede o no ser requerida; consulta a un abogado para encontrar que método encaja mejor con tu proyecto.
Muchos proyectos usan dos CLAs ligeramente diferentes, uno para individuos, y otra para contribuyentes corporativos. Pero en ambos casos, el mensaje es el mismo: el contribuyente garantiza al proyecto el derecho "perpetuo, mundial, no exclusivo, sin cargo, libre royalties por derechos de autor, licencia de copyright irrevocable para reproducir, hacer trabajos derivados, mostrar públicamente, ejecución pública, sublicenciar, y distribuir las contribuciones y los trabajos derivados." De nuevo, deberías tener un abogado para aprobar cualquier CLA, pero si introduces todos estos adjetivos en él, probablemente esté bien.
Cuando solicites CLAs a los contribuyentes, asegúrate de remarcar que no estás solicitando transferencia de copyright. De hecho, muchos CLAs empiezan recordando esto al lector:
Esto sólo es un acuerdo de licencia: no transfiere la propiedad intelectual y no cambia tus derechos a usar tus propias contribuciones para cualquier otro propósito.
Aquí hay algunos ejemplos:
CLAs para individuales:
CLAs para corporaciones:
La transferencia de Copyright significa que el contribuyente asigna al proyecto la propiedad intelectual en sus contribuciones. Idealmente, se realiza sobre papel y envíado mediante fax o correo postal al proyecto.
Algunos proyectos insisten en la transferencia total porque que una sola entidad legal posea el copyright de todo el código puede ser útil si alguna vez los términos de la licencia de código abierto deben hacerse valer en un tribunal. Si no existe una entidad única que tenga el derecho de hacerlo, todos los contribuyentes deberían cooperar, pero algunos podrían no tener tiempo o no poder ser contactados cuando el problema surja.
Distintas organizaciones aplican diferentes cantidades de rigor en la tarea de recolectar asignaciones. Algunas simplemente solicitan un manifiesto informal del contribuyente en una lista de correo pública — algo en la línea de "Por la presente otorgo los derechos de autor en este código al proyecto, con arreglo a las mismas condiciones que el resto del código". Algún abogado de aquellos con los que he hablado dice que es suficiente, presumiblemente porque ocurre en un contexto en el que la asignación de los derechos de autor es habitual y esperada, y porque representa un esfuerzo de buena fé por parte del proyecto para determinar las verdaderas intenciones del desarrollador. Por otro lado, la Free Software Foundation va al otro extremo: solicitan a los contribuyentes a firmar físicamente y enviar por correo postal un documento con un manifiesto formal de asignación de copyright, algunas veces sólo por la contribución en cuestión, otras por la presente y futuras contribuciones. Si el desarrollador está empleado, la FSF solicita al empleador que lo firme también.
La paranoia de la FSF es comprensible. Si alguien viola los términos de la GPL incorporando parte de su software en software propietario, la FSG necesitará demandar en un juzgado, y querrán que sus derechos de autor sean lo más herméticos posible cuando esto suceda. Dado que la FSF es titular de los derechos de autor de gran cantidad de software muy popular, esto se ve como una posibilidad real. Si tú organización necesita ser igualmente escrupulosa es algo que sólo tú puedes decidir, en consulta con los abogados. En general, a menos que exista alguna razón específica para que tu proyecto requiera asignación de todos los derechos de autor, utiliza los CLAs: son más cómodos para todo el mundo.